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14/05/2009 EFE
Alrededor de 160 niños menores de edad esperan en los distintos centros de acogida de la provincia de Córdoba a una familia que se haga cargo de ellos, mientras que un total de 207 menores ya disfrutan de una tutela en acogimiento familiar.
La delegada de la Consejería para la Igualdad y Bienestar Social en Córdoba, Silvia Cañero, ha informado hoy en conferencia de prensa de que el 60 por ciento de los niños acogidos se encuentran bajo la tutela de algún familiar, la mayoría con sus abuelos, mientras que el 81,7 por ciento de los que viven con familias acogedoras lo hacen de forma permanente.
Cañero ha destacado que el Programa de Acogimiento Familiar de menores pretende darle una alternativa social a aquellos niños que, por distintas circunstancias, son separados de sus familias de origen para que puedan desarrollarse como personas dentro de otro núcleo familiar normalizado donde gozarán de "más cariño" que en los centros de acogida.
A este respecto, la delegada de Igualdad ha explicado que aunque los centros de menores cuentan con una "gran profesionalidad", las familias les proporcionan una atención más individual y personalizada, al tiempo que ofrecen una educación integral en el ámbito familiar.
El 75 por ciento de las familias que acogen a menores corresponden a matrimonios de unos 40 años, junto a un 10 por ciento de mujeres viudas y un 7 por ciento de mujeres solteras, lo que demuestra que "las mujeres acogen más que los hombres", ha indicado Cañero.
Por su parte, Araceli Medina, de la Asociación de Voluntarios de Acción Social (AVAS), ha explicado que dentro de este programa hay dos modalidades distintas.
Por un lado existe el "acogimiento sencillo", en el que la familia recibe a un menor en su hogar por un periodo breve de tiempo que no suele superar el año, mientras que "el acogimiento permanente" tiene una duración que supera los 12 meses.
Asimismo, Antonio Martínez, de la Federación de Mujeres Progresistas de Andalucía (MPA), ha destacado la labor del Acogimiento Simple con Familia de Urgencia, modalidad que nació en abril de 2008 y que trata de evitar que los niños que son separados de sus padres por diferentes situaciones de desprotección lleguen a ingresar en un centro de acogida.
De este modo, ha indicado Martínez, las familias de urgencia se comprometen a estar dispuestos a acoger a menores, normalmente de entre cero a siete años, en cualquier momento, son familias que "están de guardia" y por ello reciben una remuneración a cambio.
En la actualidad, Córdoba cuenta con cuatro familias de urgencia pero se aumentará esta cantidad en los próximos meses, ya que "cada vez son más los interesados" y hay varias de ellas que están en proceso de formación y evaluación de idoneidad, ha dicho Martínez.
Antonia Luque, madre de dos niñas adoptadas y dos de acogida permanente, ha expresado desde su experiencia que "aunque duela dejar luego a los niños, siempre te queda la satisfacción de saber que se llevan el cariño de una familia".
Luque ha añadido que lo "más importante" es pensar en el apoyo a los niños y no en la necesidad de los mayores de ser padres.
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